Ante todo, aclarar mi postura para que no me malinterpretéis: no es que el pachangueo me guste, en absoluto. Odio a los Bisbales y Pitbulls de turno. Tengo un gusto bastante amplio en cuanto a música. Tanto de calidad como comercial (de mayor y menor calidad, que de todo hay) y electrónica y no electrónica, pero a la hora de salir creo que donde haya pachanga se tiene mucho más asegurada la diversión.
Para empezar, tienes que tener unos amigos, y sobre todo amigas muy selectas para que les guste tanto la buena música electrónica como a ti. Es muy fácil verse un fin de semana queriendo ir a un set de ese dj que tanto te gusta pero encontrarse sin nadie que te acompañe, pero, pregunta cuantos o cuantas irían contigo a ver a Fito y sus Fitipaldis, por poner un ejemplo, y sin querer decir que su música sea pachanga (aunque con lo que se prodiga en pubs, cualquiera diría). Seguro que te salen tantos amigos como con los Donettes. Si a la música comercial se la llama “comercial” será porque le gusta a más gente, digo yo, ¿no?
En un pub o local de pachanga la gente va a divertirse, claramente, no a disfrutar de la música, así que si lo que quieres es conocer gente, bailar un rato o ligar, tienes muchas más posibilidades de apuntarte un tanto en un sitio así que en una sesión de… . Por supuesto, si lo que te gusta es la música, eres un melómano empedernido y lo que quieres es conocer el directo de tu artista favorito, el pachangueo no es lo tuyo. Pero hay que diferenciar y tener claro que una cosa no debe estar reñida con la otra. Puedes ser un clubber unos días y un “pachanguer” otros, no se han observado incompatibilidades, a no ser que estés demasiado preocupado por el que dirán y donde puedan verte.
Por otra parte, puedes conseguir colársela a tus amigos: “vamos a la sesión de este dj en tal o cual club, que está muy bien y encima es gratis…” Y tú vas diciendo, joder, como me lo voy a pasar esta noche. Pero te encuentras a tus amigos fuera de lugar, toda la noche queriendo cambiar de domicilio y molestándote, sin dejar que disfrutes tu sesión, y encima, cuando todo acaba, te encuentras con esas críticas que todos conocemos y que se convertirán en recurrentes cada vez que habléis de una “noche fiasco”. Puede que no merezca la pena.
Por mi parte, para salir, es mejor dejar que decidan “las masas”; mejor 10 contentos y 1 descontento, que además no tiene por que estarlo, porque salir a tomarse unas copas, disfrutar de la charla y la compañía de los amigos y pegarse unos bailes no tiene porque ser bajo la cabina del más reputado dj… mejor eso, que verte aguantando las quejas de esos 10 toda la noche y hasta no se sabe cuanto tiempo después. Se puede disfrutar de la noche mientras Dj Periquito El De Los Palotes lo hace lo mejor que puede para que sincronizar los beats de When Love Takes Over y La Oreja de Van Gogh. A no ser, claro, que seas un tío o tía con suerte, y tengas una panda formada íntegramente por clubbers. Estarías entonces en esa “masa” encargada de elegir todas las noches, y entonces, te merecerías mi enhorabuena y mi envidia sana enterna.
Foto | Juska Wendland
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